La peculiaridad de la orografía de esta zona conlleva también una
peculiaridad climática en ella. Las arribes constituyen una geografía a salvo
del viento y más expuesta al sol debido a su menor altitud. Por ello, en los
arribes existen dos tipos de climatología. En la parte más baja de ellos impera
un clima mediterráneo que suaviza las temperaturas, más propio de zonas como el
levante español, es decir, en las arribes las temperaturas invernales no son
tan bajas, por tanto las heladas no son frecuentes y en ellas es posible el
cultivo de vegetación termófila. En la parte más alta se presenta ya el clima
continental propio de la penillanura zamorano-salmantina, donde los inviernos
son más fríos y acusados. Los factores que influyen en este contraste climático
son la geografía, la altitud y la latitud. En el observatorio de Mieza, situado
a 646 m de altura, se registran 12,2ºC de temperatura media anual mientras que
en el de la presa de Saucelle, situado a 116 m de altura, se registran 17,1ºC.
Para comparar, por ejemplo, hay que tener en cuenta que la temperatura media
anual de Valencia es de 16,9ºC.
La
latitud también influye en el contraste climático. Se nota más en el sur que en
el norte. En el observatorio del Salto de Castro (el más septentrional del
parque) se registran 12,9ºC de
temperatura media anual, mientras que en el observatorio de la presa de
Saucelle (el más meridional del parque) se registran 17,1ºC.
a.
ÍNDICES DE TEMPERATURA
Los inviernos duran aproximadamente dos meses en las proximidades del
río, ya que en esta zona se da un microclima mediterráneo más suave y húmedo.
Esto se debe a que los valles están a salvo del viento y más expuestos al sol.
En las zonas colindantes de la meseta zamorano-salmantina se prolongan durante
tres meses más, al presentarse una climatología más fría y seca, propia del
clima continental. Las temperaturas medias del mes más gélido (enero o
diciembre), están en torno a 8ºC en las zonas de valle, mientras que en las
zonas de mayor altitud rondan los 4ºC. La diferencia más notable entre una zona
y otra son las heladas, prácticamente inexistentes en los valles. Esto posibilita
el cultivo de olivos, vides, almendros y naranjos, que no son habituales en la
meseta.
a.
ÍNDICES DE PRECIPITACIONES
Las precipitaciones se distribuyen de una forma muy irregular por toda
la zona. El observatorio que registra un mayor volumen de ellas es el de Mieza,
donde se obtienen 728,2 mm anuales, mientras que el observatorio que registra
un menor volumen de ellas se encuentra a menos de 30 km del de Mieza. Es el de
Hinojosa de Duero, donde se obtienen 512,5 mm anuales. En términos generales,
las precipitaciones son más abundantes al norte. En casi toda la zona zamorana
los datos están más cercanos a los 700 mm mientras que en casi toda la zona
salmantina los datos están más cercanos a los 600 mm.
No hay comentarios:
Publicar un comentario